Donna Quesada: Lo que podemos cambiar son nuestras percepciones, las cuales tienen el efecto de cambiar todo.
Al tomar una ruta diferente, vas a ver cosas diferentes; y verás las mismas cosas desde una perspectiva diferente, un ángulo diferente. Cuando eso ocurre, ves más dimensiones y empiezas a entender a un nivel más profundo lo que realmente es algo. Un simple cambio en la forma de ver los acontecimientos y los sucesos puede cambiar y/o mejorar mucho tu vida. La perspectiva tiene que ver con lo que eliges enfocar. Lo que elijas enfocar determina cómo te sentirás. Si eliges centrarte en todas las cosas negativas de tu vida, así será tu vida. Al cambiar de perspectiva, podemos obtener una mayor comprensión y conseguir una felicidad más profunda. Cambiar de perspectiva es un ejercicio saludable si queremos ser empáticos, racionales y compasivos. En otras palabras, nuestro sentido de la compasión por los demás no tiene por qué ser el motor para buscar un ángulo alternativo de las cosas. Una vez que las personas pueden ver el problema y la situación tanto desde su propia perspectiva como desde la de los demás, pueden encontrar más fácilmente soluciones mutuamente beneficiosas. Adoptar una perspectiva también comunica que uno entiende realmente sus pensamientos, sentimientos y necesidades.