Platón: El principio es la parte más importante del trabajo.
El principio es lo que nos va a permitir comenzar, es el impulso que necesitamos para poner en marcha nuestras intenciones y planes. Es la intención de empezar a hacer algo de nuevo o el proceso de establecer algo desde cero. No es difícil entender que el principio de cualquier acción o proyecto es la parte más importante. Sin intención de hacerlo no llegará nunca a su fin, lo que significa que no habrás obtenido los resultados que tú querías. Y aunque por algún casual caigas sobre lo que querías, no será más que eso, un golpe de suerte casual. El principio es el paso para conseguir un gran cambio en nuestras vidas. Por eso, es habitual que cuando tomas la decisión de hacer dieta o de retomar los estudios, o de empezar a hacer yoga encuentres muy fácil llevarlo a cabo durante los primeros días o semanas. La mayoría de la gente se siente especialmente motivada cuanto acaba de tomar una decisión y por eso, a menudo es más fácil comprometerse con comer sano cuando acabas de salir del médico o de inscribirte en el gimnasio o seguir el propósito de comenzar a escribir el libro que llevas aplazando tantos años. Sin embargo, el problema radica en que «los comienzos» desaparecen al cabo de unos día, semanas o meses, y tu actitud rompe el estilo de vida que quisiste llevar a cabo, arruinando todos los esfuerzos y compromisos que has realizado previamente. No hay problema, nada que no sea normal, y por algo el refranero español denota: «No hay mal que cien años dure, ni cuerpo que lo resista». Por ello, es fundamental la perseverancia.
Para que el proyecto o rutina que quieres llevar a cabo funcione, deberás empezar a planificar el siguiente paso. En momentos de deseperación intenta relajarte, pensar con la cabeza fría, visualizar lo que quieres y cómo continuarías si lo estuvieses consiguiendo (que es lo que le ocurre a muchas personas, sobre todo cuando están preparadas para obtener el resultado, como por ejemplo el mío de la entrevista que me permitiría trabajar en un sólo sitio, tener horarios y un trabajo estable) y como ya hemos dicho en anteriores frases, no dejes para mañana lo que puedas hacer hoy, y no permitas que la procrastinación se pose sobre ti, porque entonces estaría inevitablemente más complicado conseguir tu objetivo, y consérvate optimista. Si te sientes perdido o abandonas tu objetivo, arrancarlo de nuevo será aún más duro y la resistencia será 10 veces más complicada porque no sólo te enfrentas a tu propia pereza o desidia, sino que ahora también te enfrentas a la frustración de haberlo intentado previamente, por lo que no debes conseguir el objetivo propuesto, sumándole la impaciencia, irritación, etc. Volver a empezar puede ser frustrante. No es agradable constatar que has desperdiciado un montón de tiempo y / o energía en algo que no te ha servido para nada. Una persona sensata podría fácilmente decir que ha renunciado al primer intento de lo que sea porque no le había hecho falta ni un segundo intento y es que la perseverancia es fundamental, pero aún más fundamental es ser realista. Si te rindes en el primer intento siempre buscarás excusas, tienes que tomar decisiones para que todo sea lo más ordenado posible, debes darte cuenta de lo importante que era para ti una cosa, lo difícil que era conseguirla y en el momento que ya tienes una pieza del puzzle, empieza a crear la duda de cómo sería si ya tuvieses la siguiente, como sería si consiguiese (por ejemplo) el costumbre de estudiar, que también requerirá tiempo, hasta que llegará el día que eso pasará a formar parte de tu rutina y ya todo será mucho más fácil. En la vida siempre encontraremos reveses, pues como ya hemos dicho en un post previamente, son sólo días malos, no mala vida, pero hay que buscar la forma de arrancar de nuevo y continuar, estudiar los errores previos y aprender de ellos, porque fracasar no significa conformarte con ser mediocre, significa hacerlo mejor la siguiente vez. Si tienes que empezar de cero, piensa en todo lo que has aprendido del primer intento, qué has descubierto qué te ha ocurrido y en qué te has equivocado, y plantéate cómo hacerlo mejor la próxima vez, adapta tu plan al siguiente paso y avanza organizado.
Piensa que es más fácil empezar a practicar de cero que ser mejor que ejercitar, porque aunque en ambos casos duela cuando tus músculos ya estaban entrenados, no suele ser un dolor intenso como el dolor de las agujetas del primer día de ejercicio después de estar mucho tiempo sin hacerlo.
Inspírate con más fotos de frases:
Nelson Mandela: Me gustan los amigos que tienen pensamientos independientes porque suelen hacerte ver los problemas desde todos los ángulos
Darius Foroux: Mantener una amistad requiere trabajo. No des nada por hecho. Podrían alejarse de ti
Abraham Lincoln: Disciplina es saber escoger entre lo que quieres ahora y lo que más quieres.
Abraham Lincoln: La mejor manera de predecir tu futuro es crearlo
Platón: La civilización es la victoria de la persuasión sobre la fuerza.
Jimmy Dean: No puedo cambiar la dirección del viento, pero puedo justar mis velas para llegar siempre a mi destino
G. Washington: La libertad, cuando empieza a echar raíces, es una planta de rápido crecimiento.
H. Jackson Brown, Jr.: La mejor preparación para el mañana es hacer lo mejor posible hoy.
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