Buda: Es capaz el que piensa que es capaz.
Nuestra mayor limitación, a menudo, somos nosotros mismos. Cuando nos proponemos un objetivo y realmente nos creemos capaces de conseguirlo, podría decirse que tenemos la mitad del trabajo hecho. Entonces solo falta ponerse manos a la obra. Sin embargo, cuando tu mente se dice a sí misma que es imposible o muy difícil, que por un motivo u otro no vas a poder, solo estás poniendo obstáculos en tu camino. De repente, haces de cada pequeña dificultad un mundo porque te falta la determinación para seguir adelante, te falta creer en ti mismo.