4 Etapas Del Crecimiento Personal
Existen cuatro diferentes etapas del crecimiento personal y cada una de ellas pueden aplicarse en nuestras vidas a lo largo de los años con el fin de enfocarnos en lo que realmente importa para nosotros y maximizar los resultados.
Estas etapas tampoco siguen un orden estricto, sino que pueden intercambiarse según el día, el mes o una etapa que estemos atravesando. Cada una de ellas funcionan en un individuo de diferentes maneras.
Expansión abierta
La expansión abierta es la primera fase de crecimiento personal. Para entenderlo mejor, imagina un círculo con flechas que apuntan hacia todas las direcciones. Es una imagen que lo describe a la perfección: expansión abierta. Se trata de conocer personas de ningún sector en particular, de escuchar nuevas ideas, trabajar, explorar nuevos campos y tomar todo lo que se pueda encontrar.
Otro buen ejemplo es imaginar a un bebé recién nacido que abre sus ojos para descubrir el mundo. Todo lo que ve es nuevo y todo es una oportunidad. Es exactamente la manera en que tú debes ver el mundo en esta etapa de crecimieto personal. Esa es la expansión abierta: todo es nuevo y todo puede ser válido.
Un día asistes a una reunión, te tomas un café e intercambias ideas, escuchas propuestas de negocios, te propones nuevos proyectos, pero sin enfocarse demasiado en el tiempo. Por el contrario, te centras en tu crecimiento, en tus intereses, pero en ningún momento implica moverse en una dirección fija.
Si te sientes un poco perdido porque pareciera que no te diriges a un lugar en específico, o si es que han ocurrido cambios muy dramáticos en tu vida, la expansión abierta es el primer paso para ayudarte a encontrar el camino correcto.
Expansión hacia adelante
Retomamos la idea del círculo, solo que esta vez las flechas no apuntan en todas direcciones, más bien hay menos y parece que se dirigen a un punto más específico. Después de exprimentar la etapa de expansión abierta, en donde conociste personas muy diversas, hiciste networking, entre otros, ahora te sientes interesado en un área en particular.
Quieres saber más al respecto y por eso sigues conociendo a más personas, relacionándote con aquellos más afines a dicha área y expandiendo tu interés social en esa dirección.
No obstante, todavía no es momento de definir el objetivo por completo ni actuar de forma apresurada. Aún en esta etapa tienes la oportunidad de expandir tus horizontes, pero digamos que solo en una sola dirección.
Enfoque hacia adelante
En contraste con la segunda etapa, ahora sí que vas a reducir los espacios de ese círculo y vas a avanzar hacia adelante, en una dirección bien definida y rápidamente hacia el área específica que más te interese. Esto es, por ejemplo, cuando se te presenta una oportunidad laboral, un negocio o un proyecto. No es el momento para distracciones sino de actuar, de ponerse manos a la obra.
En esta etapa o fase ya no hay tiempo para expandirse o conocer otras personas porque se supone que ya están las elegidas. Con ellas tienes nuevos desafíos, te aportan energía y ánimo para pasar tiempo y trabajar con ellos.
Ahora sí es el momento de empezar a profundizar y no mirar a los lados. Solo hay ojos para enfocarse en un objetivo único, en lo que realmente quieres hacer porque has descubierto qué es lo que te gusta, lo que te interesa, te apasiona y te llena.
Enfoque angosto
La relación entre el enfoque angosto y el enfoque hacia adelante es muy estrecha. La diferencia está en que en vez de desplazarse hacia adelante, estás estrechando tu enfoque. Es decir, ya no son líneas paralelas hacia adelante, sino que las líneas se aproximan una hacia la otra.
Es una representación que muestra que es el momento de reducir las distracciones al máximo en todo tu alrededor. Ya no hay que conocer nuevas personas que no estén estrictamente relacionadas con tus proyectos, con tus planes.
Imagina que tienes una start-up en mente, un proyecto de negocio o incluso un producto que sabes que va a funcionar y que va a triunfar en el mercado. Tan solo debes construirlo y el enfoque angosto es la etapa indicada para construir.
Es cuando debes estar 100% enfocado, trabajando duro para alcanzar la meta. El tiempo de buscar nuevas oportunidades ya pasó, ahora es el momento de enfocarse, construir y crear.
Conclusión
Tú puedes aplicar estas cuatro etapas de crecimiento personal en tu vida. Es tu vida la que te dirá eso que necesitas, te dirá si estás en una fase de redescubrimiento personal absoluto.
Si por el contrario, en tu vida han sucedido eventos muy importantes que ya te han brindado la oportunidad de redescubrirte y de reinventarte, quiere decir que estás en una etapa de expansión abierta. Podrás abrite a cualquier tipo de oportunidades.
Si más bien sientes que actualmente ya tienes proyectos más definidos, o por lo menos, ciertas ideas de una empresa, conoces bien lo que debes trabajar y enfocarte, estarás en una fase más avanzada, probablemente en el enfoque hacia adelante.
Puedes aprender más sobre el crecimiento personal en este artículo.
Si necesitas inspiración, aquí podrás encontrar frases de motivación.