Estoy Bloqueado ¿Qué puedo hacer?
Una hoja en blanco es intimidante, en especial cuando tienes una fecha límite para terminar y tan solo un par de ideas abstractas en tu cabeza. Empieza la duda a devorarte y te empiezas a hacer preguntas. ¿Y si no es del todo correcto? ¿Y si la gente juzga con dureza? ¿Y si esta idea en realidad no es tan buena como se pensaba? Preocupaciones como estas son responsables de un gran nivel de estrés innecesario.
¿Cómo logramos que sea más sencillo comenzar? Realizando un primer borrador para eliminar ciertos obstáculos. En esto consiste un borrador:
- No ser perfecto. De hecho, el objetivo es que sea imperfecto y sin pulir.
- No revisarse para preparar su lanzamiento. Su objetivo es ofrecer comentarios reales y concretos.
- Sacar las ideas de la cabeza para plasmarlas en un papel. Así es más fácil ver el valor de una idea antes de invertir demasiado tiempo en ella. Si no vale la pena, entonces se descarta.
Un borrador debe ser un paso rápido porque su única finalidad es que un proyecto deje de ser una idea vaga para empezar a convertirse en algo tangible, real, pero completamente modificable. Hay mucha diferencia entre una idea en la que se necesita empezar a trabajar y un proyecto que se inició pero que necesita ser terminado. Es el impulso psicológico, es el progreso. Cuando un proyecto tiene suficiente impulso, entonces se termina más rápido.
Crea algo simple para obtener un concepto de trabajo ‘real’.
Cuando el equipo es capaz de tocar y sentir, entonces la idea se percibe como algo real. Es mucho más fácil de ajustar que con un simple modelo mental. En cambio, el borrador necesita muy poco tiempo para palpar ese plan, que sea tangible. El proyecto simplemente dura menos tiempo en la cabeza de quien tuvo la idea, en consecuencia, quienes trabajarán para obtener el resultado de la idea dispondrán de más tiempo.
Eliminar conjeturas de nuevos proyectos.
Los borradores son fantásticos para deshacerse de las conjeturas en esfuerzos futuros. Son una herramienta realmente útil que sirven para pavimentar el camino y eliminar muchos obstáculos mientras se trabaja en un proyecto.
Múltiples empresas le sacan un gran provecho a los borradores ya que aplica para todo. Desde el diseño de una página web, la creación de una aplicación móvil, una novela, una película, el diseño de un automóvil y básicamente cualquier cosa que te puedas imaginar. El tipo de trabajo que estés haciendo es lo menos importante, lo primordial es dar los primeros pasos con un borrador rápido. Los resultados son increíbles y de mayor calidad en todos los sentidos.
Tener margen para el error.
En el caso particular de un redactor, a veces pasan horas y horas intentando infructuosamente escribir algo perfecto al primer intento. Creadores de aplicaciones y páginas web han invertido días codificando una función que al final terminó siendo completamente innecesaria y, por ende, tuvieron que eliminarla. ¿Otro ejemplo? Centenas de diseñadores tirando a la basura su trabajo porque primero se preocuparon por la estética en vez de analizar en qué se iba a utilizar, cuál era su propósito, en qué iba a ser útil para las personas.
Algunos sienten una gran presión porque cada proyecto debe ser perfecto por donde se le mire. Es una presión interna y que hace sufrir a las personas cuando los resultados no son los esperados al primer intento.
No más miedo al fracaso.
Personas pierden días de vida, semanas, incluso meses buscando la perfección siendo apenas la primera vez. Además de que es miedo al fracaso, desconocen que las cosas pueden plasmarse primero en un borrador.
Cuando te enfocas única y exclusivamente al trabajo, en que cada línea de código sea inmejorable, cada píxel y cada trazo, entonces invertirás demasiado tiempo en ello sin siquiera saber si al final el resultado será positivo. Cuando no es lo que esperábamos, entonces la decepción es abrumadora. Sentimos que fallamos a nosotros mismos, a nuestros clientes, a los empleados y hasta a nuestros antepasados que se dedicaron a lo mismo.
Eventualmente todos llegamos a comprender una llamativa frase de Ernest Hemingway que decía que el primer borrador de lo que fuera era una basura. Y eso está bien. Procesar este hecho y aplicarlo es de gran ayuda para que los resultados finales sean de la mejor calidad posible.
Por darles un ejemplo más palpable, este artículo empezó como una simple lista de consejos acerca de cómo ser más productivo, se extendió un poco y luego se simplificó para enfocarse en este concepto. Una vez escrito se realizaron un par de revisiones y lo leyó alguien más antes de que todos los lectores tuvieran acceso a este.
¿Te imaginas todo lo que serías capaz de empezar, emprender y lograr cuando te des la oportunidad de equivocarte tanto como quieras en los borradores? Intenta y valora tú mismo los resultados.